Das ähnliche Geschöpf

Me dice mi amigo Alberto que el día que le den un ostia será una ostia de la ostia, y que será algo de lo nadie pueda reírse, y dice que ya no volverá a ser el mismo. Y se ríe mientras lo dice, bueno, exactamente se ríe después de decirlo, el día que me den un ostia será una ostia de la ostia, dice, entonces se ríe e insiste, ya no volveré a ser el mismo, pero bueno, de estas cosas no se recupera nadie. Lo dice como si tuviera gracia, o como si conociera un secreto que nadie más podría descifrar, y se ríe, se ríe como si tuviera gracia.


Es el miedo a organizarse lo que nos impide el paraíso, la gente no trabaja para ganarse la vida, no es un problema de hipotecas, ni de caprichos, es solo miedo, dice. Si todos fuesen como yo, si todos hicieran lo que quieren como yo, todos bien. ¿Tú has visto que yo tenga alguna complicación? Bueno, a veces me enamoro más de lo que debería pero, es sólo un capricho o solo una forma de decir que yo no soy como ellos, creo… Y se ríe.
Mi amigo Alberto, y diga lo que diga, se ríe después de hablar. Siempre, y diga lo que diga...
Diga lo que diga podemos pasarnos la noche charlando. Pero siempre hay alguien que baja de la habitación y nos dice que no puede dormir. Mi amigo Alberto no sabe reír con indulgencia, y la despierta. Los dos estamos de acuerdo. Es tan hermosa…

Mi amigo Alberto que entiende las señales vengan del mundo que vengan, me dice:
-Amigo, es hora de retirarse. No vayan a pensar que yo estoy loco y que tú eres la única persona que me escucha.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Creíamos atrás los temores... Pero sin ellos no hay control, ni incertidumbre, ni ansiedad. El miedo determina la incapacidad para determinar qué podemos hacer (y qué no). Nos crean el miedo. y debemos hacer inofensivo el miedo. Y, sí, reir. Creo que estoy con tu amigo Alberto.

George

Anónimo dijo...

Inteligente reflexión.
Los mayores decimos: el miedo guarda la viña y nos quedamos tan a gusto con nuestro neoconservadurismo.
A la mierda el miedo. A la mierda con casi todo.
Vive la République.
Salud,
M

Anónimo dijo...

Macho, ando más bobo que repetido.
A ver cuándo es domingo para ir a misa, pero este domingo, eh -decía Juanidius- no vale otro, y si cae en sábado, mejor todavía.
(A este miedo hay que meterle aunque ande dentro).
Alb.

Anónimo dijo...

¡Desterremos el miedo! Ahora que en cualquier lugar se habla de la crisis-financiera, alimentaria, del precio del petróleo, de confianza- los de siempre volvemos a tener miedo al mañana, sin darnos cuenta que éste nos paraliza. Mientras otros, también los de siempre, estarán haciendo su "agosto", porque no tienen miedo y se han puesto en marcha: Actuan!
Agüe in action

Anónimo dijo...

Me apunto a lo que dice la Agüe firmante.
Ellos, los malotes, siempre están actuando.
Salud,
M

Anónimo dijo...

Me apunto a lo que dice la Agüe firmante.
Ellos, los malotes, siempre están actuando.
Salud,
M

Anónimo dijo...

Hay que hacer algo, Sr. Topo. Las pirañas, en las calles, no nos dejan respirar con sus acosos. Todos quieren firmas para una misma causa. Han enloquecido y, a día de hoy, entran con la guillotina en casa diciendo que venden pollos y gallinejas. El servicio es rápido, pero nadie quiere salir del servicio porque es donde más a gusto se está, aunque sea leyendo sin parar y sin parangón y nunca jamás parando.
Usted es sabio, Sr. Topo, usted debería de desplegar sus súper-poderes. Acabar con esta polución y misoginia que reina y embrutece.